Es un ingrediente de una amplia gama de remedios para el resfriado y la gripe, se puede combinar con otros analgésicos y medicamentos contra el mareo, nos ayuda con el dolor de cabeza, los dolores musculares, la artritis...es, junto con el ibuprofeno, el pan de cada día de la mayor parte de la población.
Además, el coronavirus ha aumentado el consumo de este medicamento hasta el punto de que hubo falta de suministro durante plena pandemia y se ha convertido en el producto estrella con las nuevas variantes.
Sin embargo, parece que al ser tan común, hemos dejado a un lado que es realmente peligroso si no llevamos un control de las dosis adecuada. Una sobredosis de paracetamol puede causar daños graves.
La toma es sencilla, utiliza el paracetamol exactamente como se indica en la etiqueta o como se lo haya recetado su médico. Ahora bien, si hablamos de un dolor de cabeza que no nos deja trabajar, sabemos que no padecemos ningún problema que el paracetamol lo perjudique y no es algo habitual que hagamos, te recomendamos lo siguiente:
La cantidad máxima para adultos es de 1 gramo (1000 mg) por dosis y 4 gramos (4000 mg) al día. Ten en cuenta que el paracetamol puede venir en diferentes formatos, aunque casi siempre usemos la pastilla. Hablamos del supositorio, el formato líquido o el efervescente. Sea el formato que sea, siempre hay que dejar al menos 4 horas entre las dosis, aunque es recomendable separar más las tomas.
En cuanto a los niños, hay que tener mucho cuidado. Se recomienda el uso del paracetamol líquido, como el tan conocido Dalsy, entre otros muchos. La dosis máxima diaria será de 2 cucharaditas (10 ml) si tiene entre 6 y 8 años, 2 cucharaditas y media (12.5 ml) si tiene entre 9 y 10 y hasta 3 (15 ml) si llega a los 11 años. Te dejamos este enlace para que consultes la toma de su hijo.
Al igual que en adultos, las tomas se harán cada 4h o 6h, según sea necesario, pero nunca superando las cinco tomas en 24 horas.
Teniendo ya todo esto en cuenta, por supuesto, no uses este medicamento sin consultar antes a su médico o si bebe más de tres bebidas alcohólicas al día o ha padecido una enfermedad hepática.
Tampoco si es alérgico al acetaminofén o al propio paracetamol o está embarazada (o lo sospecha). Parece que es la pastilla milagro, pero hay que tener cuidado cuando se trata de nuestra salud.
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