Denzel Washington ha estado en los titulares por menesteres relacionados con los Oscar (no ganó el premio a mejor actor, galardón que fue a parar a noticias /entretenimiento/netflix-sony-paralizan-proyectos-will-smith-policias-rebeldes-4-1039351" title="Las consecuencias del bofetón: Netflix y Sony paralizan los proyectos con Will Smith, incluyendo Policías Rebeldes 4">Will Smith, que tuvo una noche movidita), pero como consuelo puede disfrutar de los 405.993 dólares extra que tiene en su cuenta como resultado de la venta de su Porsche 911.
El ejemplar, de 1997 y versión Turbo, despertó mucho interés, lo que llevó a una escalada de precios bastante rápida, que acabó con un precio de subasta del equivalente a casi 364.000 euros según el cambio actual.
Motivos para ello había unos cuantos. Para empezar, era el coche del actor, que entregaba un documento firmado con el Porsche, además que había sido hasta ahora su único dueño. Además, su kilometraje es bastante reducido, con 18.000 millas (28.968 kilómetros).
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También hay que reconocer que su estado de conservación es realmente bueno, con una combinación exterior/interior todo al negro, llantas de 18 pulgadas con diseño de cinco radios, luces tipo xenón o alerón fijo, lo que le da un aspecto impecable.
Además, Washington no se cortó a la hora de sumar extras para el 911: asientos de cuero delante y detrás, techo solar, control de crucero, acabado en aluminio para diversos elementos interiores, salidas de escape ovales de acero inoxidable, sistema de sonido Nokia con cargador de seis CD, etc.
Por último, no se puede obviar el hecho de que es un Porsche 911 y, además, un Turbo, que en este caso significa que monta un motor 3.6 turbo de seis cilindros que desarrolla 408 CV y los manda a las cuatro ruedas a través de una caja de cambios manual de seis velocidades.
Este artículo fue publicado en Autobild por Mario Herráez.
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