Las delegaciones de Rusia y Ucrania han iniciado este martes en Estambul una nueva ronda de negociaciones presenciales bajo los auspicios del Gobierno turco, tras dos semanas de discusiones por videoconferencia. El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha pedido a ambos equipos negociadores “una paz justa” en la que, según ha afirmado, “no debería haber un perdedor”. El objetivo fundamental de este nuevo diálogo entre asesores presidenciales rusos y ucranios es alcanzar un alto el fuego. Sin embargo, aunque ambas partes se han mostrado dispuestas a acercar posturas, un abismo sigue separando las exigencias del país invasor, Rusia, de las demandas que Kiev ha asegurado estar dispuesto a aceptar; especialmente en cuanto a la reclamación de que Ucrania reconozca la soberanía rusa de Crimea —que Moscú invadió y se anexionó ilegalmente en 2014— y la independencia de la región de Donbás. El ministro de Asuntos Exteriores ucranio, Dmytro Kuleba, ha resumido la postura de su país respecto a esta negociación con una frase: “[A cambio de la paz] no estamos dispuestos a intercambiar personas, territorio o soberanía”.
¿Qué exige Rusia para parar la guerra?
Las principales exigencias de Rusia para parar la guerra que inició hace cinco semanas no han variado sustancialmente de las que el presidente Vladímir Putin enumeró justo antes de lanzar la invasión de Ucrania del 24 de febrero, según confirmó el ministro de Exteriores ucranio Kuleba en una entrevista con este diario. Estas demandas rusas son, primero, que Ucrania acepte un estatus de neutralidad, es decir, que renuncie a unirse a la OTAN, y además lo blinde inscribiendo este compromiso en su Constitución, que ahora recoge la meta de sumarse a la Alianza Atlántica. En segundo lugar, que Kiev reconozca como territorio ruso a la península de Crimea, que Moscú se anexionó hace ocho años con un referéndum celebrado en ese territorio bajo presencia militar y no reconocido por la comunidad internacional.
Otra reclamación de Rusia a Ucrania es el reconocimiento de Donetsk y Lugansk, en el área oriental ucrania de Donbás, como estados independientes. Entre las demandas iniciales de Rusia figuraban inicialmente la “desnazificación” de Ucrania —Putin sostiene que el Gobierno y el ejército de ese país están controlados por neonazis y grupos de extrema derecha—, la desmilitarización y la protección de la lengua rusa en la exrepública soviética.
¿Cuáles son las condiciones de Ucrania?
Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Las principales condiciones de Ucrania para un posible acuerdo de paz son tres: la primera es la obtención de garantías de seguridad. La segunda es el reconocimiento de su integridad territorial dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas —lo que incluye a Crimea y el Donbás— y la tercera es un alto el fuego y la retirada del Ejército ruso. Kiev exige además la apertura de corredores humanitarios para evacuar a la población de las zonas asediadas por las tropas rusas con un compromiso expreso de Moscú de que no se va a atacar a los civiles que huyen.
¿A qué se refiere Ucrania cuando pide garantías de seguridad?
En su conversación con EL PAÍS, el ministro Kuleba precisó que su Gobierno aspira a “algo similar” al artículo 5 de la OTAN; es decir, un compromiso de los Estados que se hagan garantes de la seguridad de Ucrania de defender el país si alguien lo ataca. Kuleba detalló que esas garantías obligarían a “aquellos países que brindan sus garantías de seguridad a proveer a Ucrania en 24 horas de todas las armas necesarias, adoptar una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU exigiendo parar la agresión e imponer sanciones”. El ministro aseguró que Kiev está “en conversaciones con Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia y Turquía sobre su potencial participación en este modelo”.
¿Cuáles son los principales escollos para las negociaciones?
Las cuestiones en las que las posturas de Moscú y Ucrania siguen siendo más irreconciliables son la cuestión territorial y los aspectos ligados a la soberanía nacional ucrania. En su alocución televisada del domingo, el presidente Zelenski remarcó que quiere la paz pero precisó que ambas cuestiones constituyen líneas rojas para su país: “La soberanía y la integridad territorial de Ucrania están fuera de cualquier duda”. Frente a ello, Rusia insiste en su exigencia de que Ucrania acepte el hecho consumado de su anexión unilateral de Crimea en 2014 y reconozca la soberanía rusa sobre esa parte de su territorio. Moscú reclama también que Kiev renuncie a las regiones de Donetsk y Lugansk, en Donbás, y reconozca a las dos provincias de esa región ucrania como estados independientes. En 2014, poco después del referéndum ilegal en Crimea, los separatistas prorrusos, apoyados por el Kremlin, hicieron una votación en parte de esos territorios para reclamar la independencia. Antes de la invasión, Putin las reconoció como repúblicas, asumiendo además su reclamación de todo el Donbás (área donde está, por ejemplo, Mariupol) aunque solo controlaban en ese momento una tercera parte.
¿En qué se han acercado las posiciones por parte de Ucrania?
Zelenski ha reiterado que su país está dispuesto a discutir sobre un estatus de neutralidad para su país y a renunciar a formar parte de la OTAN, la última vez este domingo, en una entrevista con varios medios de comunicación independientes rusos. Sin embargo, el presidente ucranio condiciona esta discusión a una retirada de las tropas rusas y a que esta cuestión se someta a referéndum, ya que se requeriría un cambio constitucional. Como ha hecho durante todo su periodo de Gobierno, Zelenski insistió en su entrevista con los medios rusos —vetada para su emisión en Rusia— que Kiev no tiene planes de recuperar por la fuerza todo el territorio de Donetsk y Lugansk. El presidente ucranio aludió a un “compromiso” sobre el Donbás y dejó entrever que aceptaría una vuelta al statu quo previo a la invasión; es decir, una retirada de las fuerzas rusas a la línea de demarcación que, antes del 24 de febrero, separaba la zona de Donbás bajo control de Moscú, a través de los separatistas prorrusos, del área dominada por el Ejército ucranio.
¿Y por parte de Rusia?
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, aseguró el lunes que veía “posible” un acuerdo entre Rusia y Ucrania. Moscú podría haber renunciado a algunas de sus exigencias iniciales a Ucrania, sobre todo en tres aspectos: la desmilitarización del país, la protección legal del ruso —cerca del 30% de ucranios tienen ese idioma como lengua materna— y lo que Putin definía como “desnazificación”, de acuerdo con Financial Times, que asegura haber accedido al borrador del alto el fuego sobre el que trabajan las delegaciones rusa y ucrania en Estambul. Rusia podría estar dispuesta a aceptar también que Ucrania ingrese en la Unión Europea, siempre según el documento citado por ese periódico.
Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
0 Comments:
Publicar un comentario