En los años 2000 y 2010 en España se pirateaba muchísimo contenido audiovisual. Tanto es así que éramos uno de los cinco países que más infracciones cometía contra la propiedad intelectual.
Durante años, nuestra política interna no ha perseguido con tanta ferocidad la piratería como algunos de los países europeos, como es el caso de Alemania, donde era habitual multar a los ciudadanos que descargaban películas de forma ilícita.
Según un estudio desarrollado por OBS Business School, en España se ha reducido en un 25 % las prácticas relacionadas con la piratería, lo que ha hecho que el 63 % de los españoles consuman contenidos culturales vía online de forma legal.
El tráfico de estas webs de entretenimiento, como Netflix, Prime Video, Disney+ o HBO Max ha aumentado en un 70 % en los últimos años, por lo que las prácticas delictivas se han ido viendo superadas por el consumo legal de contenido audiovisual.
El coronavirus ha tenido mucho que ver. Según el estudio, el gasto medio de los hogares en productos electrónicos se ha incrementado en un 44 % en comparación con los datos prepandemia.
De ser un país de piratas, donde no se perseguía al consumidor, solamente a la gente que se lucraba con la piratería, hemos pasado a que 3 de cada 5 españoles tenga una cuenta en, al menos, 2 plataformas de streaming distintas.
Según vemos en los estudios de audiencia que se publican trimestralmente, Netflix y Prime Video son las plataformas más usadas en nuestro país sin ninguna competencia detrás. Luego estaría Disney+ y HBO Max. Pero sin olvidar Filmin, la plataforma más querida por los españoles, según la OCU.
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